La mercancía que adquirieron floristas para el “Día de Muertos” no se vendió y el agua las pudrió
Heidi Castellanos
Coatzacoalcos, Ver.
Cerca de cien mil pesos fueron las pérdidas económicas que tuvieron floristas ubicados en las inmediaciones del panteón “Antiguo” de Coatzacoalcos, en el sur de Veracruz, tiraron toneladas de flor de cempasúchil, mano de león, entre otras, que fueron dañadas por las torrenciales lluvias.
Alfredo Cruz Flores, comediante de flores, expuso que esperaban buenas ventas durante el “Día de Muertos”, pero los efectos del Frente Frío número 8, afectaron las actividades en los panteones y terminaron por dañar las flores.
“Se tiró casi medio camión de puras flores, ponle barato como unos cien mil pesos y estamos hablando como de unas cinco toneladas que se perdió.
El agua nunca dejó entrar a la gente al panteón, estaba el aguacero, cayendo árboles”, expresó.
Los bites de basura del camposanto estaban reflejos de flores y aún costado del acceso, habían un cúmulo de flores, hasta el mazo fueron desechadas porque se pudieron.
Los comerciantes coincidieron que no habían registrado tantas pérdidas como este año, ni siquiera en la pandemia de Covid-19, y aseguran que esta situación no fue solo en Coatzacoalcos, sino en otros municipios del sur de Veracruz donde se vivieron los efectos del fenómeno meteorológico, sin embargo el puerto fue el más afectado, por el cierre de los panteones.
“No pensamos que nos afectara tanto, no nada más fuimos nosotros, fueron varios y en otros lugares también”, dijo Verónica, fluoritas de Coatzacoalcos.
Alfredo expuso que tratarán de comunicarse con sus proveedores para pedirles una prórroga con el pago, expuso que la mercancía la adquirieron a crédito, confiados en las buenas ventas esperaban sacar la inversión y ganancias, sin embargo hubo pura pérdidas.
Ahora continuarán ofreciendo sus productos como lo son flores, ramos y arreglos de otra mercancía para poder pagar lo del “Día Muertos”
“Todos pedimos fiado ahora si a crédito, ahora nos sentimos mal porque como lo vamos a pagar y hay que pagarles porque es gente de campo y tienen que seguirle sembrando, pero los contactaremos”, añadió.
Entre los mazos, los trabajadores buscan recuperar las flores que continúan con vida, para evitar seguir tirando más a la basura.