El santuario de la Virgen de Guadalupe se ha convertido en un destino para feligreses que realizan promesas a la virgen_
Heidi Castellanos
Coatzacoalcos,Ver.
Conforme se acerca la celebración de la Virgen de Guadalupe, la presencia de peregrinos incrementa por el sur de Veracruz. Algunos solo van de paso con destino a la Ciudad de México o incluso ya vienen de regreso, pero otros eligieron a Coatzacoalcos para cumplir sus promesas.
Los integrantes de la agrupación “Vela Guadalupe” pedalearon sus bicicletas durante 9 días desde Mérida, Yucatan para poder llegar al Santuario de la Virgen de Guadalupe en Coatzacoalcos.
José Vela explicó que viaja con su familia y con conocidos que se unieron a la agrupación, son diferentes peticiones las que le solicitan a la Virgen.
“La promesa mayormente es agradecimiento por las bendiciones que nos ha dado la virgen, por mi familia, y comencé esta promesa hace 6 años, le pedí mucho a la virgen que yo cambie personalmente y que le de salud a ellos.
Vengo con una hija, dos hijos, mi esposa y mi sobrina”, detalló.
Son 13 personas entre niños, jóvenes y adultos los que emprendieron su viaje en bicicleta, algunos llevaban más de 6 años cumpliendo esta promesa a la Virgen, para otros como Alfredo Antonio es su primer año y cuenta que en esta ocasión se enfrentaron a las fuertes lluvias y al cansancio de las subidas.
Sin embargo expresó que es algo que volvería a realizar, porque pese a los peligros a los que se enfrentan es una experiencia de fe inolvidable y satisfactoria.
“Es bastante duro por el camino, vamos subiendo y los cerros, es complicado estar pedaleando, te cansa, pero con la fe que tienes podrás lograrlo lo que tu prometiste hacer, por la familia, por la salud y por el trabajo, es bonito, pero a la vez es peligroso”, expresó.
Esta agrupación dio a conocer que antes de emprender este viaje se prepararon 8 meses tanto espiritualmente como físicamente, siempre teniendo presente las dificultades que se encuentran los caminos, por fortuna dieron a conocer que no tuvieron percances mayores, solo viajar en medio de la lluvia.
En sus bicicletas no pueden faltar refacciones, alimento, sábanas, impermeables y sobre todo luz, ya que saben lo peligroso que es viajar de esta manera por las carreteras.
“Traemos de todo, la gente de nuestro pueblo cuando sabe que vamos a salir nos dan víveres y traemos un mototaxi, para las mujeres y niños”, añadió José.
Se espera que en el mes de diciembre se incremente aún más la presencia de peregrinos qué pasa por Veracruz.
